Se comprende Matrix como un modelo energético que transforma pautas, patrones, procesos que se repiten, que pueden generar incluso dolencias crónicas y que están influyendo negativamente en nuestra percepción de la realidad, ocasionando un desequilibrio a nivel mental, físico y emocional.
Desde Matrix se trabaja con la ansiedad, las fobias, el estrés o las dolencias físicas y emocionales, relaciones laborales, afectivas, proyectos, patrones de conducta repetitivos, procesos no deseados, en definitiva, todo lo que nos genere infelicidad o trastorno.
Muy importante: Hay que hacer constar que Matrix no sustituye a ningún tratamiento o terapia indicada en cualquier proceso médico o psicológico.
La sesión individual o personalizada dura aproximadamente entre 30 y 90 minutos, dependiendo de la diversidad o complejidad de la temática con la que se tiene que trabajar.
Prevío a la sesión se realiza una entrevista para saber con exactitud cuál es el proceso en que nos tenemos que enfocar y en qué punto del mismo se encuentra la persona a tratar
En este tipo de sesión se incide muy especialmente en el estado anímico de la persona por lo que en la mayoría de las ocasiones se experimenta un estado de euforia y de bienestar superlativo, parece que la percepción sobre el conflicto ha cambiado o se sabe cómo abordarlo efectivamente, esto es debido a la visión transformada de una realidad que nos mantenía en estado de paralización o frustración.
La transformación se aplica a través de la denominada Ola energética, un verdadero torbellino de energía que se genera a través de una activación del campo mórfico adecuado.
La conexión con la Matrix Divina es tan sensitiva que muchas de las transformaciones realizadas se quedan integradas en una sola sesión.
Las sesiones se trabajan normalmente para una temática específica a tratar de manera profunda, generalmente se opera con los tres campos referentes de Matrix de forma generalizada, es decir mental, físico y emocional, por este orden e incidiendo particularmente en alguno de ellos a criterio del terapeuta.
Con esto basta para cambiar la realidad, pero también se ha observado que, después de esos momentos de euforia y, ante cualquier adversidad, vienen momentos de crisis que acentúan más si cabe el conflicto percibido, por lo que es recomendable, incidir en cada campo de manera exclusiva para erradicar esa visión tóxica muchas veces arraigada profundamente en el subconsciente de la persona a tratar.
La duracion de estas sesiones específicas es aproximadamente de:
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